Tu carro está vacío.
Hace poco llegó a nuestras manos el reciente estrenado libro de la Dra. Natasha Campbell-McBride, “GAPS, el síndrome psico-intestinal”, un libro que a quién más, quién menos, seguro que le resonará porque es realmente abrumador la cantidad de enfermedades y dolencias/molestias que todos tenemos hoy en día vinculadas al aparato digestivo (¡yo la primera!).
Hay muchas maneras de meditar. A través del yoga, de la respiración, de la naturaleza, de la danza… pero la forma más simple, accesible y que tradicionalmente conocemos como meditación requiere que nos sentemos cómodamente en un lugar tranquilo y practiquemos la atención plena.
Es bien sabido que la alimentación saludable y el ejercicio son dos pilares básicos para tener una buena salud. Pero ¿por qué nos cuesta tanto llevarlo a la práctica, o si conseguimos llevarlo a la práctica, a veces, por qué no tenemos los resultados deseados?
He vivido una época estresante (¡para qué vamos a engañarnos!). El postparto es una montaña rusa emocional. En esta etapa el verbo “ayudar” se hizo casi el protagonista de mi vida. Sentía que no sabía ayudar a mi bebé (soy madre primeriza), que me daba vergüenza pedir tanta ayuda, que no sabían ayudarme como quería, que no me daban ayuda los que quería, etc.
Hemos pasado ya el Solsiticio de verano: el día más feliz del año, también llamado Yellow Day. Los días de verano y sus correspondientes noches tienen un sabor especial, un sabor de… ¡LIBERTAD plena!
Y aunque esa noche ya haya pasado, VIVE tantes noches como puedas como si fueran las más mágicas del año.